viernes, 25 de noviembre de 2016

Perfil de un femicida, según una investigadora de UFLO

Tomando como objeto la antesala del acto criminal, la psicóloga forense Patricia Martínez Llenas estudió doce casos penales por homicidio, entre los que se encuentra un resonante asesinato de una mujer en Río Negro.


¿Qué pasa por la mente de un asesino a la hora de consumar el hecho? Es el interrogante central que plantea el proyecto de la Lic. Patricia Martínez Llenas, psicóloga clínica forense e investigadora de la Universidad de Flores, quien junto a un grupo de especialistas analizó doce casos penales por homicidio ocurridos en Cipolletti, Río Negro. El estudio aborda el pasaje al acto criminal, concepto que pretende comprender desde los contenidos intrapsíquicos del autor a partir de la aplicación de técnicas de exploración psicológicas proyectivas –como, por ejemplo, el psicodiagnóstico de Rorschach– y las técnicas gráficas proyectivas.

“Se refiere a actos irreflexivos, impulsivos, fuera de control o difícilmente controlables. De ahí que el autor del pasaje al acto reemplace la reflexión por medio del acto. Por eso la frase tan repetida de estos criminales, que cuando se les pregunta por el motivo que diera origen a su accionar homicida, responden ‘No sé, me agarró así, no sé por qué’”, señala Martínez Llenas, quien seleccionó los casos a partir de su experiencia como perito psicóloga.

La Lic Martínez Llenas, al frente de la investigación
Si bien la investigación es previa al auge del movimiento Ni Una Menos, es inevitable detenerse en un femicidio incluído en el relevamiento, que conmocionó a la sociedad rionegrina.  Sucedió en 2014, en la localidad de Catriel, donde un hombre asesinó de una puñalada en el cuello a su expareja delante de sus dos hijas. El caso estuvo a cargo de la Cámara Segunda de Cipolletti, que condenó al autor del hecho a prisión perpetua.

Como aclara Martínez Llenas, es erróneo trazar un único perfil de femicida, dado que cada uno responde a sus propias motivaciones, estudiadas desde los factores intrapsíquicos. Pero nada impide sospechar que las características del asesino de Catriel se repitan en otros homicidas. Según la psicóloga, “se trató de un caso de personalidad psicopática, agresiva-violenta. Transgresiva en cuanto al estilo de vida, consumo de drogas ilícitas, que a través de racionalizaciones machistas y revanchistas en contra de la figura de la mujer, que ya no admite maltratos y decide poner un punto final a una historia de pareja asimétrica, despierta ideas de venganza, odio, y aniquilación”. La especialista agrega que el homicida se encuadra dentro de “personalidades con severos trastornos psíquicos empeorados por el consumo toxicológico de sustancias. Se encontraron respuestas propias de la organización narcisista con claros rasgos psicopáticos homicidas”.

No se trata de un diagnóstico menor, teniendo en cuenta un contexto donde, según estadísticas, cada 30 horas una mujer es víctima de violencia de género. Estudios como el de la Lic. Martínez Llenas, basados en casos testigos, ayudan a clarificar y –sobre todo– a saber actuar a tiempo.

jueves, 24 de noviembre de 2016

“Es importante que la gente se sume a recuperar residuos independientemente de su profesión o condición social”

Referente en políticas ambientales, el ingeniero Mauricio Cogollo Rueda propone técnicas para el reciclaje y compostaje de residuos y la recuperación de espacios verdes.


“Soy ambientalista desde que aprendí a caminar”. No cuesta creerle a Mauricio Cogollo Rueda. Uno puede imaginar la infancia en Colombia de este ingeniero ambiental y sanitario, preocupándose si sus padres tiraban en una misma bolsa papeles y cáscaras de fruta. Especialista en técnicas de reciclaje de residuos sólidos, Cogollo Rueda vive hace siete años en nuestro país y reparte su tiempo entre su trabajo en la Secretaría de Higiene Urbana –órgano que depende del Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño– y la docencia en la Universidad de Flores. En ambos casos, el vínculo se dio desde el lugar de un vecino con inquietudes.


Cogollo Rueda, en plena actividad junto a vecinos de la Comuna 7


“La Comuna 7 –que comprende los barrios de Flores y Parque Chacabuco– venía trabajando el reciclaje de residuos y estimulando a vecinos a participar de talleres de separación de residuos. Yo me incorporé un año después de que el proyecto esté en marcha y empezamos a ver cómo lo podíamos fortalecer. Empecé como voluntario, trayendo material reciclable, y después terminé integrándome en el equipo”, recuerda.

Dicen que la caridad bien entendida empieza por casa. Metódicamente, además de separar el material reciclable, Cogollo Rueda recupera los residuos alimenticios que desecha en su hogar para producir abono. “Hay que impulsar el reciclaje –señala el ingeniero– porque se incorporan materias primas que se pueden introducir a un ciclo productivo. Pero el reciclaje sólo soluciona la mitad del problema: más del 40 por ciento de los residuos que se originan en una casa de familia son de origen vegetal, como cáscaras de fruta, hojas de lechuga, descartes de alimentos que se pudren, pero utilizando materiales de bajo costo como botellones plásticos de agua, baldes de pintura o madera y algunas lombrices se pueden armar composteras”.


Compostaje, un recurso al alcance de todos

El compostaje es un proceso de transformación y estabilización de estos residuos vegetales que, utilizando hongos y bacterias, se convierte en un abono de buena calidad. El método contempla un amplio abanico de posibilidades para trabajar sobre cada tipo de residuo. En el caso de los residuos domiciliarios, lo más eficiente son las lombrices. Para los residuos de madera, como los descartes de carpintería, por ejemplo, lo mejor son los hongos.

“Cuando estamos en la naturaleza, no existe el concepto de basura: las plantas mueren, los frutos se caen. Es material biorgánico que pasa por un proceso y termina abonando la misma tierra”, explica Cogollo Rueda. Para el ambientalista, el recurso es muy sencillo de implementar en cualquier hogar: “La compostera debería imitar lo más posible las condiciones del suelo con los materiales que se tengan a mano. Hay muchas composteras que ya están diseñadas, pero que yo no pueda invertir en una de ellas no significa que no la pueda hacer. Yo promuevo que la gente se haga su propia compostera: lo que la imaginación y el espacio me permitan”.

Los insectos son fundamentales para el compostaje


Por más que no se trata de un proceso complejo, el compostaje requiere de paciencia. Hay que dejar que el material se homogenice y, si se trata de desperdicios de entrecasa, que las lombrices colonicen la zona. El tiempo de proceso desde que se colocan los residuos hasta que se forma un manto de tierra es de aproximadamente dos meses, dependiendo del clima: en temporadas de calor puede tardar menos, mientras que en invierno es un poco más lento.


Reciclar y concientizar

Según Cogollo Rueda, “no basta más que instalar una mesita en una plaza y traer una muestra de lombrices o residuos orgánicos, haciendo composteras que no requieren costos, y la gente se engancha”, pero reconoce que la iniciativa merece mayor compromiso tanto del ámbito público como del privado. “Independientemente que de que se cumpla o no, hay mucha información circulando. Se sabe, por ejemplo, que el cartón y el vidrio se reciclan”.

Con un pie en ambos universos –el Gobierno de la Ciudad y la UFLO, que establecieron un convenio de cooperación–, el ingeniero trabaja varias iniciativas en la Comuna 7. Junto al Área de Higiene Urbana, Espacios Verdes y Desarrollo Socio-Ambiental y un grupo de voluntarios están recuperando el Patio Porteño Fray Cayetano Rodríguez, cercano a la estación de Flores, donde montaron una colección de plantas nativas. “El patio estaba abandonado, prácticamente sin vegetación, entonces decidimos embellecerlo y poner allí un jardín de plantas nativas. Hoy en día estamos llegando a las setenta especies. Tenemos de todo: árboles, herbáceas, enredaderas, plantas que atraen mariposas”, dice Cogollo Rueda, mientras cuenta que desde la Red Ambiental – Comuna 7 se planea replicar la experiencia en un espacio similar en la calle Donato Álvarez. Además, el año pasado participó de una jornada en la universidad sobre gestión de residuos sólidos, con nutrida asistencia de vecinos.

Cada vecino puede fabricar su propia compostera, de acuerdo a su imaginación o espacio físico



Vivir con lo necesario

No es una tendencia nueva, pero la agenda ambiental cada vez pone mayor énfasis en el concepto de economía circular. Se pregona por una revisión sobre el flujo y el circuito de los recursos, aunque la cuestión no es nada fácil si se tiene en cuenta el descarte serial en el que vivimos. Se extraen recursos naturales, se procesan, se vende un producto, se consume y se tira. “Cada vez tenemos más presión y una población en aumento, igual que sus necesidades”, opina Cogollo Rueda, y cita las metas que fijaba Agenda 21, el plan de acción ambiental propuesto por la ONU a fines de la década del 90, en el que uno de propósitos era satisfacer las necesidades básicas de toda la comunidad. Pero, claro, las necesidades actuales son muy distintas a las de hace quince años.

De todas maneras, Cogollo Rueda está lejos ser un fundamentalista. “Todos queremos tener el último celular. Eso no es oponerse al confort que nos ofrecen estos adelantos, pero no podemos negar que se genera más presión extractiva. ¿Adónde van a parar esos celulares qué se descartan? La economía circular, entonces, apuesta a que la extracción sea la mínima indispensable, que la producción sea limpia, que el consumidor sea responsable y que a la hora del descarte, buscar la manera de que ese elemento se reincorpore al ciclo productivo”, concluye.


Contactos:

Facebook: Compostaje Domiciliario
Twitter: @mauricio1cr

lunes, 21 de noviembre de 2016

Convocatoria Ordinaria a Proyectos y Programas de Investigación bianuales 2017 – 2019

Se priorizará la financiación de aquellos proyectos que se encuadren dentro de las líneas temáticas que la Universidad considera importantes para desarrollar en cada área científica.

La Universidad de Flores, a través de su Secretaría de Investigación y Desarrollo, informa a toda su comunidad académica que se encuentra abierta la convocatoria ordinaria a Proyectos y Programas de Investigación bianuales 2017 – 2019.




Plazo para la presentación de nuevos Proyectos:

Desde el 1º de noviembre al 15 de diciembre (sin excepción) para la Sede Buenos Aires y Sede Regional Comahue.

- La presentación de los proyectos deberá ajustarse a las normas disponibles en: http://institucional.uflo.edu.ar/uflo/investigacion/4-normativa  (Formulario de Presentación de Proyectos) o solicitar por mail a sinvestydes@uflo.edu.ar

Junto al Proyecto deberá presentarse CVar de todos los integrantes del equipo de investigación y un presupuesto tentativo que incluya equipos y gastos, por un total de $20.000 anuales. Detallando además, una proyección tentativa de aquellos congresos y jornadas en los que se prevea participación.

La Secretaría de Investigación y Desarrollo priorizará la financiación de aquellos proyectos que se encuadren dentro de las líneas temáticas que la Universidad de Flores considera importantes para desarrollar en cada área científica.

Teniendo en cuenta que los montos asignados a cada proyecto de investigación son subsidio, los mismos estarán destinados a dos rubros: a) equipo permanente y b) gastos. En equipo permanente se incluirá: 1) equipos, instrumental e instalaciones menores; 2) bibliografía, equipos a construir, programas de computación, etc. En gastos se incluirá: material de consumo, reactivos, viáticos justificados, gastos para asistencia a congresos, gastos a terceros, etc.

Líneas Prioritarias de Investigación:

Calidad de Vida

- Calidad de Vida y Salud

- Calidad de Vida y Sociedad

- Calidad de Vida y Ambiente Físico

Sustentabilidad

- Sustentabilidad Social

- Sustentabilidad Ambiental

Inclusión

- Estudios sobre Crecimiento y Desarrollo Social y Ambiental

Líneas específicas por facultad:

Facultad de Psicología

a) Prevención de Maltrato, Violencia y Acoso.

b) Rendimiento Académico, Vocación y Trabajo.

c) Vulnerabilidad y Factores Protectores en Salud Mental.

d) Actividad Profesional en Salud Mental.

Facultad de Planeamiento Socio-Ambiental

a) Patrimonio

b) Proyecto y Producción

c) Energías renovables

Facultad de Actividad Física y Deporte

a) Actividad física y salud

b) Actividad física y espacio urbano

c) Educación física y evaluación

d) Análisis de las prácticas de intervención profesional de la actividad física y el deporte

e) Análisis del rendimiento deportivo

Facultad de Ingeniería

a) Bioindicadores y biorremediación

b) Urbanización

c) Impacto ambiental

Facultad de Derecho

a) Minoridad

b) Violencia

c) Violencia de género

d) Derecho romano

e) Inclusión y discapacidad

Facultad de Administración

a) Responsabilidad Social Empresaria

b) Microemprendimientos y alternativas económico sociales

c) Comportamiento humano en las organizaciones

Conformación de Equipos:

- El equipo de investigación que llevará adelante el proyecto deberá estar conformado por un mínimo de cuatro (4) integrantes incluyendo al director.

- Se podrán incluir integrantes de otras instituciones siempre y cuando no supere un medio (1/2) de la totalidad de los miembros del grupo, o una cantidad que se adapte a lo determinado por convenios preexistentes con otras entidades.

- En casos donde las razones sean debidamente fundamentadas, se podrán contemplar proyectos de investigación con menor número de integrantes.

- Los grupos de investigación podrán contar con un director externo a la Universidad de Flores. En este caso, deberá designarse un codirector local quien será responsable, además de las funciones propias de la codirección, de la ejecución y rendición de los subsidios que reciba el proyecto.

- El director y el co–director (si lo hubiera) podrán presentarse a dos (2) proyectos siempre que las cargas horarias sean compatibles.

El director del proyecto o programa de investigación deberá cumplir alguno de estos requisitos:

1) poseer una destacada trayectoria en la dirección de grupos de investigación,

2) en el caso del director de Programa de Investigación, el director será además evaluado por la Comisión de Investigación,

3) ser miembro de la Carrera de Investigador Científico y Tecnológico de CONICET con una categoría no inferior a Investigador adjunto o

4) estar confirmado en las categorías I, II o III del Programa de Incentivos del Ministerio de Cultura y Educación de la Nación o su equivalente en el sistema de categorización de la Universidad de Flores u otro sistema validado por la Secretaría General de Investigación y Desarrollo.

- El proyecto deberá incluir al menos un alumno en el equipo de investigación, cuya participación estará a cargo de los propios investigadores del proyecto.

- Los estudiantes deben declarar interés en el área temática del proyecto y poseer cualidades académicas que propicien el trabajo en el equipo y posibiliten logros en la carrera de investigador.

jueves, 10 de noviembre de 2016

“Los chicos que pasaron por el PEALI logran mejores niveles de comprensión y fluidez lectora”


La psicopedagoga de UFLO Mariela Caputo elaboró un innovador plan que estimula las habilidades cognitivas de los niños durante el Nivel Inicial.

Estos tiempos donde existe un relevante interés por el funcionamiento del cerebro humano (las astronómicas cifras de venta de los libros del neurólogo Facundo Manes son un caso testigo) resultan un caldo de cultivo ideal para profundizar los estudios de estas temáticas.

Tomando como objeto de interés el cerebro de un niño durante el nivel inicial de educación, la Lic. Mariela Caputo, psicopedagoga recibida en la Universidad de Flores, y donde además es docente, y Magister en Neuropsicología (UNIMORON), elaboró el Plan Estratégico de Adquisición de la Lectura Inicial (PEALI). En esta iniciativa se propuso pensar estrategias prácticas que ayudan a mejorar la calidad de la metodología de la enseñanza en aquel período y brindar capacitación a docentes para tal efecto, integrando distintos programas de enseñanza de la lectoescritura.

La Lic. Caputo, en el jardín de infantes que dirige

Desde Diálogos, el jardín de infantes del cual es directora, la Lic. Caputo diseñó una serie de actividades para estimular adecuadamente las habilidades cognitivas de los niños previas a la adquisición de la lectura y que derivaron en la publicación del libro PEALI, neurodidáctica de la lectura inicial (Diálogos Libros, 2012) y un cuadernillo que las detalla.

“En UFLO tuve profesores que son actualmente referentes  conocidos en el área de la neurociencia y neuropsicología, y ahí me empecé a empapar de este tema, que me apasionó”, señala la Lic. Caputo, quien actualmente prepara un proyecto de investigación que ampliará los resultados de su trabajo inicial.

¿Cómo surge el concepto de neurodidáctica y cómo se desprende de la neurociencia?
La neurociencia es la base teórica. Es la disciplina que sustenta el desarrollo de la investigación referida a habilidades cognitivas. Necesitamos saber cómo procesa la información en el cerebro de un niño en el nivel inicial. El término neurodidáctica surge porque, a diferencia de la mayoría de las asociaciones con la neuropsicología, que sí es la ciencia que estudia la relación entre la conducta y las acciones del cerebro, es que específicamente se está trabajando con un docente y una secuencia de actividades para estimular en una escuela. Tomé en cuenta el término para poder enseñarle a un docente cuál es la forma de estimular a un niño en el período crítico de desarrollo de su cerebro. En este caso me involucré con el desarrollo de la lectoescritura y escribí este libro que tiene que ver la neurodidáctica de la lectoescritura inicial. Yo soy directora de un jardín, entonces trabajamos para que el docente entienda cómo  el cerebro va desarrollando esas habilidades en período que va desde 0 a 7 años, donde hay mucha plasticidad neuronal.

¿Cómo se aplica esa técnica en el jardín de infantes que dirigís?
Trabajo en el jardín desde los 17 años. Primero como maestra, después tomé un cargo de vicedirección con formación pedagógica, y ahora soy directora. Cuando empecé a trabajar en este nivel, uní las disciplinas y entendí que el docente, sin ser un experto, también debía formarse en esta línea. Tiene que saber qué habilidades cognitivas se están activando a la hora de empezar a leer. Entonces trabajamos con capacitación docente previa para después armar una secuencia didáctica que estimule estas funciones en el cerebro. La idea es saber cuestiones básicas como, por ejemplo, que para poder incorporar un aprendizaje el cerebro necesita tener sistematización de ese contenido. Tiene que haber repetición, motivación, no se puede enseñar algo aislado. Algo básico para la lectoescritura como la conciencia fonológica, nosotros lo tratamos desde el jardín maternal. Fui compilando estas actividades que se fueron generando a partir de estas capacitaciones con supervisión docente y armé este plan.

Estaríamos hablando de un proyecto no habitual, ¿verdad?
En el diseño curricular, tanto de Capital como de Provincia, no existe este tipo de estimulaciones en el área de prácticas del lenguaje. Si bien en el ámbito psicopedagógico se trabaja sobre prevención de trastornos del aprendizaje, en el estímulo de un niño con desarrollo típico no está. También armé una prueba de evaluación de screening –una prueba acotada– para sala de cinco y evaluamos el nivel que alcanzaron los chicos. Cuando hice la investigación comparé dos grupos de chicos, uno con el que aplicamos el PEALI y otro que no, y la diferencia que encontramos es que los chicos que habían ido a jardín maternal también habían tenido buen nivel de desarrollo de estas actividades que se piden en la primaria, como la comprensión lectora, pero los chicos que además tuvieron el PEALI estaban mucho más avanzado.

¿Qué problemas detectaron en los chicos durante el proceso?
Estas habilidades –conciencia fonológica, silábica, rimas, percepción visual, principio alfabético, memoria auditiva y visual– están inmersas en el momento de leer y escribir en el futuro. Los chicos que nosotros vemos que esto les cuesta, y que se viene trabajando desde sala de tres, cuatro y cinco pero sigue igual costándole, generalmente pueden tener problemas de dislexia. Es decir, en sala de cinco no podemos asegurar dislexia porque el chico primero tiene que pasar por el proceso de alfabetización, pero podemos detectar características que indiquen que posiblemente tengan algún trastorno en el aprendizaje. Lo ideal es detectarlo y trabajarlo cuanto antes, así el chico cuenta con todos los recursos para salir adelante cuando comienza primer grado. No se puede perder el tiempo.

¿Cómo va a seguir tu investigación?
El primer objetivo era armar este plan, en que la investigación era fundamental para sostener el trabajo. Ahora queremos digitalizar el cuadernillo en formato para tablets, para que sea un recurso tecnológico dentro de una escuela para una psicopedagoga o una fonoaudióloga. Para ampliar esta primera etapa de la investigación, voy validar la prueba de screening con una población más grande en una plataforma digital para procesar los resultados. Además voy a incorporar otras habilidades, no sólo cognitivas, sino también evaluaremos lo que en inglés se define como schoolreadiness, que son habilidades cognitivas y sociales y hábitos para la organización de estudios que un niño de 5/6 años deberá tener para el ingreso escolar. Entonces se van a incorporar a subtests de motricidad y cuestiones de educación emocional, a fin de elaborar un perfil más completo. En eso se va a basar la investigación que voy a hacer para el doctorado.

¿Cuál va a ser el recorte de los casos a analizar?
Trabajaremos con chicos del distrito de Vicente López de escuelas privadas, pero también me gustaría hacerlo con sectores más vulnerables. Y en el futuro ampliarlo a nivel país. En la segunda fase de este proyecto de investigación, un grupo tendrá la estimulación y otro no lo tendrá, para evaluarlos de nuevo en segundo grado. Va a ser una investigación longitudinal, ya que con la información voy a tener primero solamente el perfil del chico de sala de cinco, no voy a poder saber si el estímulo funcionó o no. Por eso la idea es hacerla y seguir a esos mismos chicos (investigar en dos etapas).

¿Se puede establecer alguna hipótesis parcial?
Los chicos que tienen desde edades tempranas exposición a este tipo de actividades relacionadas con estas habilidades previas de lectoescritura en el nivel inicial logran mejores niveles de comprensión y fluidez lectora, lo cual es fundamental en la primaria. Evaluamos a chicos de segundo grado que ya habían desarrollado todo el proceso de alfabetización y la diferencia era muy significativa. Por eso pensamos que es bueno empezar a estimular desde el jardín.

Las transformaciones socioterritoriales en el Alto Valle de Río Negro, bajo la lupa

A partir del hallazgo de yacimientos petrolíferos en aquella región patagónica, investigadores de la Universidad de Flores analizan la revalorización de su suelo y sus consecuencias sociales.

Desde 2011, año en que YPF descubrió el yacimiento petrolífero no convencional conocido como Vaca Muerta, en el Alto Valle del Río Negro, varias empresas se instalaron en el lugar para explotar sus tierras. De un día para otro, aquella región patagónica se transformó en la gran esperanza negra de nuestro país. Pero esa aparente prosperidad, sin embargo, tiene contrapuntos que repercutieron en los habitantes. Uno de ellos fue un notorio incremento de los valores del mercado, incluyendo el del suelo. El otro gira alrededor de la tensión producida entre una actividad ya existente como la fruticultura y esta nueva avanzada petrolera.

Encabezados por el arquitecto Guillermo Tella, un grupo de investigadores de la Universidad de Flores se propuso indagar sobre aquel escenario y las dinámicas –tanto económicas como sociales– desencadenadas en torno al proyecto petrolífero de Vaca Muerta. El objetivo es presentar una serie de estrategias y de recomendaciones de actuación.

El Alto Valle, una subregión que se encuentra sobre la margen izquierda del curso superior del Río Negro y que se extiende más allá de la confluencia del Neuquén y el Limay, contiene, entre otras, las ciudades rionegrinas de General Roca, Cipolletti y Villa Regina, además de la capital de Neuquén y la también neuquina Centenario. El estudio de UFLO detectó ciertas fracturas en la economía tradicional de estas localidades, vinculadas a la incidencia del petróleo en los precios y los costos.

El Alto Valle del Río Negro, escenario del yacimiento Vaca Muerta



Revalorización del suelo vs. Aumento de costo de vida

“En ciudades de esta región”, explica el arquitecto Tella, “donde el empleo público es muy fuerte y se mueve con un tipo de economía, la actividad del petróleo es mucho más potente y tiende a distorsionar. Se generan ciertas dualidades: cuando vas a comprar al supermercado, todo está al precio del petróleo, o mejor dicho, del petrolero. Observamos una fuerte puja entre petroleros y chacareros”.

El Alto Valle late al ritmo de estas ciudades oasis, separadas entre sí por entre diez y quince kilómetros de desierto, y vive gracias un sistema de regadío por canalización creado hace más de cien años. Esto abarca 70 mil hectáreas de extensión y favorece el cultivo de peras y manzanas, pero frente al avance del petróleo todo ese suelo comienza a tensionarse. El investigador lo grafica con un ejemplo: “Viene un petrolero que necesita un campamento para ubicar a los operarios y compra una hectárea por tres veces lo que vale. Para el petrolero es poco, pero para el propietario es un montón, entonces se termina imponiendo una economía por sobre otra. Estas distorsiones son muy fuertes y van deteriorando el paisaje urbano. Aparece una ciudad que se mueve al ritmo de la actividad petrolera, que suele levantar las alamedas y los canales, por lo que también atentan contra la sustentabilidad de la región”. El chacarero, como sostiene Tella, tiene un compromiso con el territorio (lo siembra, lo cuida, cosecha los frutos) distinto al del petrolero, que extrae y abandona el lugar.


Añelo, un pequeño pueblo en el ojo de la tormenta

Ubicada a cien kilómetros de la ciudad de Neuquén, la localidad de Añelo ya había sido noticia porque de sus suelos se extrajeron hidrocarburos con métodos no convencionales (proceso más conocido como fracking). Pero por su ubicación estratégica, este pueblo de diez mil habitantes (hace diez años no superaba los dos mil) se convirtió inesperadamente en el epicentro del boom especulativo. Como consecuencia, Añelo adoptó ciertos ritos y costumbres de una ciudad petrolera –donde no están exentos el alcohol y la prostitución como refugio para trabajadores solitarios–, pero no cuenta con una infraestructura acorde a una planificación organizada.

Añelo se convirtió en el epicentro del boom especulativo
Guillermo Tella recuerda su encuentro con el intendente de Añelo, en una casa prefabricada que oficiaba como despacho: “Eso es muy simbólico respecto al tipo de decisiones que tiene que tomar: ¿qué puede hacer frente a esas empresas, tanto nacionales como internacionales, que tiene instaladas en su localidad?”.

Para los investigadores, es indispensable generar un proceso participativo de definición de crecimiento y de cuál es el papel que cumple Añelo en la región, que es el centro neurálgico de Vaca Muerta. Pero toda esta zona de confluencia no tiene un plan que permita pensar colectivamente cuál es el horizonte de crecimiento.


Resultados parciales y proyecciones

Pese a que todas estas expectativas generadas en torno al petróleo justificaban todo tipo de depredación ambiental, actualmente se abre una ventana de oportunidades. El presente contexto resulta favorable, ya que internacionalmente cayó el precio del petróleo y, por consiguiente, se frenó el boom especulativo. Pero habrá que tomar los recaudos necesarios si se produce una nueva disparada. 

Según el estudio de la Universidad de Flores, hay una metropolización incipiente en ese caudal de ciudades, incluso en aquellas que presentan características rurales (se utiliza el concepto de rurbano), pero no se está advirtiendo un proceso de integración y cada una se piensa en sí misma en materia de transporte, servicios, residuos y demás aspectos. “Ese es un problema”, señala Tella, y agrega: “Para pensarlo metropolitanamente como una región en sí misma, la idea es que cada ciudad juegue un papel en ese escenario: una que aporte servicios; otra, insumos; otra, finanzas”. 

La región, revolucionada frente al avance del petróleo

A través de un trabajo exploratorio de la zona, del comportamiento de algunos patrones y de un relevamiento de los precios del suelo, los especialistas ya arribaron algunas conclusiones parciales. Por ejemplo, un monitoreo de la zona aledaña a la plaza de Añelo demostró que, en los últimos 20 años, un lote quintuplicó su valor al ritmo de las expectativas del petróleo. Al mismo tiempo, y al haber mucha demanda y poco suelo vacante, los precios de los alquileres también se incrementaron notoriamente: la cuota mensual de una casa de dos ambientes puede llegar a costar no menos de $25.000.

El objetivo de los investigadores es establecer un diagnóstico que permita presentar una propuesta para las autoridades de la región, que comprenda hacia dónde debería evolucionar este territorio y qué rol debería desempeñar cada municipio. De esta manera, se podrá fijar una agenda que irá monitoreando el paisaje y que defina qué amerita ser preservado.